Uno de los campos más apasionantes del diseño gráfico y un tanto ignorado por el gran público y también por estudiantes del diseño  es la tipografía. A pesar de lo presente que está en nuestras vidas; documentos de word, presentaciones powerpoints, webs, blogs etc. En este articulo  daré uno consejos para el buen uso tipográfico

Consejos en el uso de tipografías: 

En la pantalla, dónde nunca sabemos cómo será el monitor del usuario, es muy importante que la lectura sea lo más confortable posible. Tipos de letra sencillos (Verdana o Arial son los más extendidos, Garamond puede ser una buena alternativa), un color acorde con el fondo, evitando estridencias y un tamaño de texto adecuado, que no haya que arrugar la nariz para leer ni tampoco tirar de scroll en cada frase, 10 u 11 pixels para el cuerpo de texto y sumando dos para los distintos niveles de título.


Presta atención al medio.
No es lo mismo leer un texto impreso que en una web, como hemos dicho es algo más fatigoso para la vista leer en pantalla. Una letra muy recargada cansan mucho la vista y se usan solo para títulos, subtítulos, citas o frases breves. Observa trabajos impresos para comprobar como queda una tipografía sobre papel y elige la más adecuada en cada caso.

Una teoria extendida recomienda usar, en los textos largos, tipos Serif para imprimir y Sans Serif para pantalla, aunque habiendo tantas y variadas fuentes probablamente se darán interesantes excepciones.

No utilices muchos tipos distintos en un mismo documento. Lo máximo recomendable serían cuatro, siempre teniendo en cuenta que una negrita cuenta como tipo. Si pones una letra con serif en el título suele funcionar mejor una sin serif en el cuerpo. Luego para los subtítulos se suele usar la misma del cuerpo de texto con dos puntos más grande o un punto y negrita.

Ten mucho cuidado con el tamaño:
Los errores mas frecuentes en  los diseñadores amateurs o simplemente aficionados del diseño es el mal uso del tamaño tipográfico, esto se debe al mal manejo de las proporciones en espacio y formatos. para ello existe esta herramienta valiosa el tipómetro que viene es una regla graduada de metal, plástico, acetato u otro material, dividida normalmente en puntos y en milímetros, que se ha utilizado tradicionalmente en artes gráficas para medir material tipográfico. La idea del tipómetro se la debemos al impresor y librero francés Martín Domingo Fertel. Debido a la informatización en el proceso de composición tipográfica, mucho más preciso, hoy día el tipómetro ha desaparecido prácticamente del ámbito profesional.


No instales muchas fuentes a la vez.
Las fuentes se cargan en memoria al iniciar Windows y una carpeta de fuentes con miles de archivos ralentiza el ordenador. También se sobrecargan los programas a la hora de desplegar la lista y ésta se vuelve inmanejable para el usuario. Mantén sólo tus preferidas y las que más uses, aparte de las de sistema.
Puedes guardar tantas tipografías como quieras bien organizadas fuera de la carpeta de Fuentes, podrás verlas haciendo doble click o bien usando un programa específico del tipo del AMP Font Viewer.

Inspírate con los profesionales.
Fijate como se usan y combinan los tipos e imítalo con descaro para tus trabajos. Por ejemplo, según el blog especializado Smashing Magazine estos son algunos de los tipos de letra preferidos por los diseñadores gráficos.

Por último pero no menos importante, si quieres que tus textos tengan un aspecto mínimamente profesional y los diseñadores no te cojan de tonto, nunca, nunca, nunca uses la Comic Sans.

BUEN USO